domingo, 5 de octubre de 2014

Jurela jigging extraño

Ya tenía ganas de volver a coincidir con el amigo Vatagón y se juntan las buenas casualidades pues me avisa de que irá este fin de semana a mojar el kayak, coincidiendo con que también yo tenía planes de acercarme por la costa. Como es debido quedamos al amanecer y estamos listos para echarnos al agua tras preparar trastos y enseres:



En cuanto paso las olas y me separo unos metros de la playa pongo la caña en el cañero delantero de la Midway para hacer un poco de curricán, pero la caña es corta y el hilo me molesta al palear así que la cambio a uno de los cañeros traseros. Abro el carrete y suelto hilo mientras remo, tras unas cuantas paladas calculo que ya habrá suficiente sedal así que me giro para cerrar el carrete y... ¡se me queda cara de pardillo! (adicional a la que ya tenga de serie)... increíble, si que anda este kayak... se me ha vaciado el carrete y todo el hilo con el señuelo nuevecito (y de los buenos) ha quedado atrás. En fin, os podréis imaginar cómo me quedé...

El compañero Vatagón se ofreció a prestarme una de sus cañas ya que la otra que me quedaba era la pequeña, con carrete y sedal malillos. Se lo agradezco pero tampoco quiero dejarle "manco" a él, así que decido salir a tierra a por otra caña. Tras una paleada a tope y una carrera estoy de vuelta al agua en apenas media hora.

Pese a que no habíamos podido preparar cebo salimos con media docena de coreanos congelados de una salida anterior y lo único que tenía por casa: langostino cocido pelado. Aunque parezca increíble estos dos cebos nos valieron un par de capturas y evitar el bolo. Aquí la primera, una diminuta breca o pagel (creo que es) que se pudo indultar sin daños:



Y casi ya cuando estábamos pensando en volver, cacharreando a jigging con la caña de 500 gramos y dejándome la muñeca en el intento saqué esta jurelilla con un montaje de tres anzuelos, dos de ellos con vinilos (que fueron mordidos pero no enganchó nada) y un tercero con trozo de langostino cocido que fue el que enganchó la jurela:



(Digo yo que sería por accidente, porque me parece raro que le entre a langostino cocido y menos a gigging jejeje). Por cierto, la jurela también fue indultada, aunque pasaba la talla mínima me dio pena verla un poco pequeña y además quise premiarla por haber sido mi primera captura peleona ;-)

2 comentarios:

  1. Zorin, a veces pasan cosas raras como la de esa jurela con langostino cocido al jigging jajjaajjaajjaajajaj.

    Si yo te cuento mi primer día al jigging que fue cuando quedé más o menos enganchado a esta modalidad.

    Fue a hace mucho a principios de enero en vacaciones de navidad en Mazarron. Mi objetivo era pescar a fondo con tiras de calamar, pero a media mañana, me di cuenta que algo raro estaba pasando.

    La pesca a fondo era muy muy mala, murrallita y nada más, pero observaba que en vez de en cuando se enganchaba un jurel, hasta que me di cuenta, que cada vez que dejaba caer el montaje de los 3 anzuelos, durante la bajada se enganchaban jureles. Y más aun cuando me percaté que esta técnica era más eficaz si los anzuelos estaban limpios, es decir sin calamar.
    Así que me puse manos a la obra, con las dos cañas y 3 anzuelos, abría línea del carrete y antes de que llegase al fondo, ya había uno o dos jureles enganchados.

    Digamos que en media hora, saqué 21 jureles, aun me acuerdo jajajajajajajaj.

    Que tiempos aquellos.

    Un saludo.

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    1. A ver cuándo me llevo yo una pescata como esa jejeje, que en mi caso la "pesca mayor" son las jurelas. Lo he intentado unas cuantas veces con plumillas y jigs pero de momento no he repetido captura alguna a jigging, a ver si para estos Reyes Magos me cae una sonda y empiezo a buscar zonas "calientes".

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